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Copio esto a pelo (sin corregir ni nada), he estado mirando apuntes antiguos y me he encontrado con este sueño (si, que pasa; apunto sueños a menudo) que me ha hecho gracia recordar. Ahí va ración de frikismo :)

…primero, una especie de minority report […], mis compañeros de piso andan por ahí trasteando y me despiertan, pero tengo la suerte de que el sueño sigue. entonces viene primero una especie de caza con aviones de combate supremos extraterrestres, tenemos que salir a la defensa de la tierra, todo en plan stealth, y yo me doy cuenta que pa que no me pillen (tienen un sistema de radar avanzadisimo) lo que hay q hacer es algo asi como tirar la piedra y esconder la mano, bueno, la paranoia es absoluta, pq  controlo el vuelo del caza con las manos como un juguete, y cuando disparo un misil, cierro la compuerta de lanzamiento, y es como si no me vieran, y soy el que voy ganando ademas de que ninguno de sus misiles me pilla, mientras aniquilan a mis amigos, soy el unico q sobrevive…. luego el sueño desvaria, y acaba una mezcla de Lost (sobre todo con john locke de por medio, con su voz su cara y todo), con la isla de los niños perdidos, viaje al centro de la tierra y una especie de jerarquia-dictadura militar que nos tiene controladisimos. La jerarquia es humana, pero merodean una especie de monstruos, que mas bien paracen bajo la tutela de la jerarquia, que hace que nos entren ganas de buscarnos la vida por nuestra cuenta y huir, y la mejor forma de esconderse es caer en los canales que hay por enmedio de las calles, que acaban siendo como pozos, casi cañones infinitamente profundos (aunque puedes tocar ambas paredes y estan atravesados por cañerias y cables) ahi estamos a salvo, hay un monton de niños de los que tambien hay que cuidar, pero parece que ahi, con John Locke, parece que nada va a pasar. Sin embargo tambien hay bichos extraños, parecen morlocks, se llevan a la gente y no vuelve a aparecer. incluso parace que hay un metodo, que dominan tanto los militares como los morlocks, para invocar la desaparicion y/o fantasmizacion de una persona, como mediante una especie de codigo, que se da a cada persona, para uso unico y cuando crea mas conveniente. algunos lo usan de forma desacertada y las victimas son sus propios familiares. Bueno, para describir este mundo, son como una especie de calles, todo cuadriculado, con sus manzanas aisladas habitadas y controladas e iluminadas, y unas pequeñas calles entregadas a la mano de dios donde caen los desperdicios. Sin embargo en esas calles si que hay vigilancia, hay focos que merodean (siempre es de noche), asi que la unica forma de esconderse es meterse en la fisura de enmedio de las calles (mas que calles, son canales, tienen una estructura escalonada y no tienen mas de tres metros de ancho) el hueco donde caer esta lleno de cables, y es calido y relativamente confortable, y el unico lugar donde esconderse. Supuestamente hay un exterior donde se es del todo libre, seguramente, un exterior desolado que nadie ha visto, pero cuando los militares pillan a alguien intentando huir, se lo llevan y nadie sabe que hacen con ellos […]

A mi me resulta curioso releer estos apuntes, porque a pesar de que en condiciones normales jamas recordaria el sueño, leyendo esto recupero con total claridad las imagenes del sueño. Imagenes que por otra parte son completamente personales e intransferibles :)

Dos truquillos para combatir el miedo y las pesadillas

En referencia a los dos post que acabo de poner acerca de para qué sirven los sueños, me he acordado de dos trucos, muy útiles y efectivos (por lo menos para mí, claro :). Me di cuenta de esto siendo pequeño (por suerte), y lo más gracioso es que aún les he dado uso en alguna ocasión…

Para no pasar miedo, (ni dentro de un sueño ni en la realidad, en un sencillo pasillo a oscuras)
Vosotros sois más fuertes. Es decir, imaginaos que en ese momento, cuando vais a vuestro cuarto y todo está a oscuras, vosotros sois realmente el terror, el maligno supremo, el horror absoluto. Vosotros sois quienes les dais miedo a los fantasmas, vampiros, aliens, nazgul y chupacabras. Les decis -cobardes, no teneis huevos a acercaros a mi! :D
Vereis como os dejan tranquilos en vuestro trayecto a oscuras hasta vuestro cuarto.

Para no tener pesadillas:
Si sabeis que habeis visto una pelicula chunga, o sencillamente alguna imagen impactante, y creeis/sabeis que esta noche os pueden hacer pasar un mal rato, es tremendamente sencillo: pensad en ello cuando vais a acostaros. Agarrad esa imagen, pensad en ella, sobadla, gastadla. Es garantia de que esta noche ya no soñais con ello. Si soñais, con todo, tendreis más probabilidades de reconocer que es un sueño y despertar de él. Hace años que no tengo pesadillas porque sencillamente me despierto.
Curiosamente, si haceis lo mismo con alguna imagen agradable, pasa lo mismo, para nuestra desgracia :D. Es como si para soñar en algo, esos recuerdos hubiera que tenerlos ligeramente aletargados.

¿Para que sirven los sueños? (y II)

::Viene de aqui::

La misión de los sueños es la de entrenarnos. Entrenarnos para la realidad.

Normalmente, se ha considerado el sueño como un estadio ‘inferior’ de realidad. Los sueños son reales en el sentido de que cuando estamos dentro de ellos estamos plenamente convencidos de su realidad, más allá de incoherencias que luego vemos ridiculas cuando estamos despiertos (pensamos, ¿y como me he podido creer yo eso?): pero dentro de los sueños el sol deslumbra, aunque luego, una vez despiertos, si pensamos ‘vaya mierda de sol el de dentro del sueño, este de verdad si que quema los ojos…’

Pero ahora, paraos a pensar ¿No os ha perseguido un vampiro-alien-araña gigante? ¿No habeis dirigido ejercitos y estado en la guerra? ¿No habeis perdido (o recuperado) a un ser querido? ¿No habeis vuelto con esa exnovia-novio que os acaba de dejar y por la que aún lo pasais fatal? ¿No habeis estado con mujeres-hombres muy deseados por vosotros? ¿¿No habeis muerto nunca dentro del sueño, en un choque de coches, accidentes aereos, ahogados, mutilados, de cien formas distintas??

Miedo, ira, vacio, amor, desesperanza, excitación… carajo, sentimientos, y vaya si son reales. Y tan reales: yo el miedo que he pasado siendo perseguido por un Alien en sistema de ventilacion de la Nostromo jamas -jamas- lo he vivido tan intenso como en la realidad -ni espero, ni creo, ni quiero que pase.
Es decir, vale: el Alien era de mentira (convengamos en que si), pero el miedo, me cago en la leche, me levanto temblando y sudando, con el cuerpo fatal… y todavia en mitad de la noche y a oscuras: va a costar volver a dormir, como poco: ese miedo es de verdad: Tan de verdad como el de verdad, ¡o más!

Es decir, tal vez, como realidad, como ‘calidad’ de realismo, la del sueño sea inferior, pero lo que nos hace sentir es perfectamente válido y real, es util y tangible, muchas ‘primeras veces’ en la vida real os han pasado antes en sueños…

Anteayer me contaron una historia, de estas típicas del Discovery Channel: por lo visto a un surfista, pongamos australiano, se le presentó un tiburon. Blanco, de los de 10 metros. En esto (¿historia que todos conocemos?), el tiburón, antes de que lo cuento, le ha arrancado una pierna, le ha dejado el femur al aire tal que asi: y antes de que acabo de contarlo ya está liado con la otra. La historia es que el surfista, puede elegir (¿entrar en estado de shock?, ¿dejarse devorar? ¿aceptar su destino? ¿luchar hasta el último momento?), y escoge ir su puño directo al ojo del tiburón.
El hombre, que ha perdido una pierna y está compartiendo la otra con el tiburón, tira directo a arrancarle un ojo. Se lo arranca. Y el tiburón, cogido por sorpresa, huye despavorido. Empate, no sé a qué, pero empate.
Tal vez un subidón de adrenalina, pero el caso es que el tio no se dejo llevar por el miedo, no se quedó paralizado.
Como la historia a lo mejor todavia no mola, cabe añadir que por lo visto el tio tuvo los cojones de llegar a nado a la costa y pedir ayuda, y hoy en día sigue bañandose en la playa.

En fin, lo que la historia y en general ese documental del que me hablaron querian decir, es que cierto tipo de reacciones por lo que parece están directamente grabadas en los genes. Y no se trata del típico -miedo=correr-, si no de un específico -si te ataca un tiburón ve a por el ojo-.
No soy de creer estas historias (me lo tomo con cautela), pero estaría guapo creer que del mismo modo, hay una serie de sueños por los que hay que pasar, como una varicela o un sarampión, una serie de escenarios más o menos predeterminados (y con un plus: inofensivos para nuestra integridad física) en los que se nos suelta para ver, no tanto como nos enfrentamos a la situación en sí, sino para ver en verdad como nos enfrentamos a nuestra propia reacción, a nuestro sentimiento.
-He de reconocer, aparte, que la integridad mental si sale tocada a veces, y pongo el sencillo ejemplo de soñar con una exnovia, luego sabeis ese puñado de dias que estais puteados creyendo que ya la habiais olvidado…-
La prueba real es el sentimiento: sería una putada que luego en la vida real un león nos cogiera por sorpresa, pero creo que sería más putada que fuese el miedo que sentimos por ese león el que nos cogiera por sorpresa…

Asi que según, esta teoria (porque al fin y al cabo no es más que una teoria, fascinante, pero teoria), que los sueños juegan este papel vital: el de enseñarnos. Seguro que estais de acuerdo conmigo en que muchas veces los sueños os han resultado útiles: desde levantarse sabiendo como se hace un problema de matemáticas, hasta entender mejor a cierta persona, o poder hacerse a la idea de una cosa lejana ahora como sería tener un hijo, quererlo y tenerlo en brazos, en fin, se me ocurren muchas situaciones.

Por lo demas, apuesto a que el surfista es un hombre feliz por saber que se enfrentó al tiburón y consiguió derrotarle. Y no dejarse dominar por el miedo, un sentimiento que seguramente ya conocia. Feliz por esto, y por saberse vivo :)

::Articulo en El Pais::
::Post original de Gianna::
::Otra cosa interesante acerca del sueño y como dormir mejor::
::Categoria al completo: Sueños::

¿Para que sirven los sueños? (I)

Este texto tambien me lo vengo reservando desde hace un tiempo, lo queria escribir y es un buen momento :)

Gianna, que desvaria tanto como el que más ;), tambien tiene sus momentos muy interesantes, y colgó un post que me hizo pensar y de lo bueno: una vez más ¿para que carajo son y sirven los sueños? Es una pregunta que se la llevan preguntando la gente desde tiempos inmemoriales, grandes filosofos han divagado genialmente sobre el tema, sobre las distintas realidades, y muchas de mis peliculas preferidas van sobre ello (y no hay que ir más lejos: ahi tenemos Matrix). Pero a mi me gusta acometer el tema desde el punto de vista ‘punsetero’ (viva Redes! :D)

Es decir, los científicos, a ciencia cierta, ni saben porque dormimos, ni porqué soñamos. Vale: para descansar, si esa respuesta le vale a alguien, cojonudo: a mi no. ¿Por qué hay que “descansar”? ¿Por qué los musculos y el resto del sistema no puede seguir sus operaciones de “mantenimiento” de otro modo? ¿No es cierto que riñones, aparato digestivo, corazon siguen funcionando mientras dormimos? ¿Acaso las heridas no curan si no lo hacemos? (vale, como aqui seguro que alguien me salta, me quito a mi mismo la razon: realmente el cuerpo realiza mejor estas funciones si esta en reposo… pero dejadme seguir :)
Adonde voy, lo más importante, ¿descansa el cerebro?. Por lo visto no, el cerebro consume nada más y nada menos que el 25% de la energia, y durante ciertas fases del descanso se detecta que su actividad es tan fuerte como en el estado normal de vigilia. Este estado es la fase REM: cuando soñamos. ¿Descansa entonces de veras el cerebro?
Además cuando soñamos pasa una cosa genial: el cerebro ‘desenchufa’ los musculos, un sencillo sistema de seguridad. De lo contrario nos levantariamos de la cama y moveriamos de forma normal, cosa que sin la debida supervisión, puede ser fatal: esto le pasa a los sonambulos. Si conoceis a alguno (yo si) vereis que esta gente está, literalmente, soñando despierta: hablan y se mueven de una forma natural, solo que perciben la realidad de un modo completamente distinto, se montan sus propias fantasias, es muy facil tanto mentirle como sonsacarle información, se comportan de un modo distinto y disonante a su personalidad, no reconoce personas ni lugares, no hay coherencia a corto plazo en sus palabras ni acciones… ¡igual que cuando soñamos!
Y pasa otra cosa: cuando estamos demasiado -el suficiente- tiempo sin dormir, acabamos forzosamente alucinando -y hay experimentos que lo documentan bien- Es decir, nuestro cerebro acaba soñando, como si lo necesitase, aunque nos encontremos despiertos.
Es decir, estos dos hechos vienen a demostrar una cosa: el sueño, este estado de alucinación, es algo inevitable, algo que el cerebro DEBE hacer para su correcto funcionamiento, tanto como la necesidad de tomar oxigeno o la de expulsar toxinas. Tan necesario es el sueño, que la evolución ha ideado un sistema: ‘desactiva’ los musculos para poder hacerlo, como hemos mencionado: duerme.

Asi, el acto del sueño, tarea necesaria para el cerebro, se convierte en un acto seguro. Para eso sirve dormir. Una explicación que me encanta, explicacíon que por supuesto y de forma inevitable, nos conduce a otra pregunta: ¿entonces de qué sirven los sueños?

Y esto es lo que he descubierto (leyendo, claro). Por lo visto, una de las teorias más fuertes que habia hasta el momento era la siguiente: el cerebro, durante el sueño, se dedica a organizar los datos, recientos o remotos; dividiendose en isletas que se reparten el trabajo, como escuadras que cogen y clasifican los papeles tirados por el suelo, pasando mientras ante nosotros como diapositivas, de forma casi aleatoria y con poco coherencia. Es un trabajo que el cerebro hace al final del dia, un trabajo imprescindible, y que explica además como es posible que nosotros mismos traguemos y nos asombremos de algo que nosotros mismos estamos creando, algo que por otra parte, no son más que retazos de recuerdos (muchas veces del mismo dia). Es una teoria bastante bonita, pero nada comparado con la que es, sin lugar a dudas, mi preferida (aunque ambas son perfectamente compatibles).

La misión de los sueños es la de entrenarnos. Entrenarnos para la realidad…

::Sigue Aqui::

Mi relación con el sueño

Ahora mismo son las 4:20 de la mañana. Buen comienzo, ¿eh? Jejeje. Partimos de un punto basico, y es que todas y cada una de las personas que habitan este planeta tienen algo en comun (olvidaré a la gente responsable, esa que hace que el mundo siga funcionando): Si las ganas que tenemos de estar en la cama cuando nos vamos a acostar (y por supuesto no me refiero al sexo) fuesen las mismas que tenemos al levantarnos (y viceversa), estaríamos en el reino de Utopía, una comunidad perfecta donde todos son siempre felices, los ruiseñores cantan, las nubes se levantan y un gigantesco arco iris surca el cielo…
(por cierto, no tiene sentido llamar a un arco iris gigantesco: todos tienen el mismo tamaño, siempre son arcos de 42º de radio respecto a la linea opuesta al sol y el punto de vista del observador)

A lo que iba. Nunca pillo con gusto la cama, no me gusta ir a dormir, me gusta quedarme hasta lo más tarde posible, desde siempre, aunque empiece a tener sueño y aunque no tenga nada real que hacer. Nunca he sido de siesta, nunca lo he encontrado reconfortante ya que la siesta acostumbra a confundirme aún más. Pero una vez caidos en los brazos de Morfeo (el dios griego del sueño; olvidaos de Laurence Fishburne, por favor) y completado un ciclo razonable que puede oscilar entre las 8 y 10 horas… ¿porque coño me gusta tanto quedarme, y despertarme, mirar la hora, y volver a dormir, y regocijarme en ello hasta por tres o cuatro horas mas?

No, no puedo decir que sea un insomne, duermo bien, profundo y una cantidad razonable de horas al dia. No tengo ninguna enfermedad, ningun desarreglo vitaminico ni hormonal, ningun sintoma extraño (en fin, creo) No es una actitud que me haya encontrado, yo la he buscado: Soy un puto noctambulo nato, queeee le vamos a hacer

Y es que me acuerdo de un jueguecito que teniamos cuando eramos infantes, y era a ver cuales eran nuestros records sueñeriles, a ver cuales fueron tanto las veces que más tarde y temprano nos habiamos levantado como acostado, eventos habitualmente ligados a alguna boda (la vez que mas tarde habiamos llegado a la cama) o alguna convalecencia (la vez que mas temprano). Con 11 años, levantarse a las 12 de la mañana era un record, durar hasta las 3 de la mañana tambien era un acontecimiento. Yo aun sigo recordando de hecho cuales fueron aquellos eventos concretos, que por supuesto se vieron ya muy superados por otros más recientes y que no soy capaz de recordar…

>>(…) Una noche con 39 de fiebre y alucinaciones. Quedarme a ver el 1,2,3 con Miriam Diaz Aroca hasta las 12 de la noche. Cada vez que ponian en la tele “Esta casa es una ruina” o “Los Goonies”, demasiado tarde, habiendo clase al dia siguiente. Conseguir ver “Desafio Total” y tener luego que dormir del susto con mis padres teniendo 10 años. Un dia durmiendo en casa de un amigo, mil veces durmiendo en casa de amigos. La nochevieja de 1996, viendo en Antena3 “2010: Odisea 2” hasta las 5 y media de la mañana. Una boda, otra boda, mil bodas. Aquel primer ordenador y todos los videojuegos que conseguí. Una noche de juerga un poco extraña, otra noche de juerga, mil noches, todas siempre bajo el beneplacito y la bendición del aún entonces restrictivo control paterno. El Canal Satelite Digital. La primera noche estudiando sin dormir. El primer trasnoche. El viaje de fin de estudios. Los dias de selectividad. La conexion a internet. El ordenador, por fin en mi dormitorio. Abandonar Informática de Gestión en Jaén y estar 9 meses en mi casa sin hacer nada. Irse mis padres de viaje una semana y quedarme solo en casa por primera vez en años. Venirme a Malaga a estudiar Diseño Industrial. Conocer a gente de mi calaña. Vivir solo y a mi aire. No tener horarios ni requisitos. (…)

Bufff. Ademas, hubo otro descubrimiento. Al trauma de levantarse a las 7 todos los dias para ir a clase, algo que hoy por hoy soy incapaz de concebir ni imaginar, se reveló un dia de nevada el placer de despertarse (mas bien, ser despertado) y darse cuenta de la posibilidad de continuar indefinidamente en la cama. Despertar para saber que se puede seguir durmiendo. Una autentica droga. A la que me he vuelto adicto. Una de los mayores placeres que se conocen, los otros tambien los conoceis bien. (comer, cagar y por supuesto, follar; ¿lo duda alguien?)

Ademas, tenia gracia cuando tenia que ir a clase, como en esos 15 minutos prudentes que me auto-regalaba desde el momento en el que el despertador sonaba y un ser mecánico que contralaba mi cuerpo realizaba automaticamente el acto de estirarse a encender la luz, y finalmente levantarme con solo otros 15 minutos para coger el autobus (los medidisimos justisimos y necesarios, ¡jamas lo perdí!), en fin, en esos 15 minutos en los que claramente me volvia a dormir, tenia sueños, y uno de ellos, el mas recurrente y curioso, consistia en el acto de darme media vuelta para mirar el despertador y corroborar que aun no habian pasado los 15 minutos de los que disponia y por lo tanto seguir durmiendo… Muchas veces, para colmo de males, el sueño consistia en que el reloj marcaba o bien una hora absurda, o peor aún; que hacia 10 minutos que se habia marchado el autobus, algo inimaginable justo por el hecho de que jamas se llegó a dar en la realidad…

No se decir en que punto de inflexion comencé esta mala costumbre. Sé que en primero de bachillerato jamas veia cronicas marcianas y en segundo veia cronicas, el telediario 3ª edicion, la teletienda y su puta madre. Oh, gran amiga la teletienda, tiene material para hacer mil monologos del club de la comedia, jejej…. El caso es que en aquella epoca dormia 4 horas al dia, luego era lógico que los fines de semana nadie me moviera de la cama. Fue ademas el año del viaje fin de estudios, el del primer trasnoche chungo, pasaron cosas interesantes por aquel entonces.

Aún tendria que llegar la selectividad, el no aprobarla, el verano estudiando, septiembre y las torres gemelas, buscar informacion sobre las carreras en internet, matricularme en Jaen de Informatica de Gestion (y aborrecerla desde el principio), hacer todos los dias 2 horas de autobus para ir a la facultad… Aquello fue raro. Conectarse a internet, para mi desde luego, fue un acontecimiento. En fin, tecnologicamente siempre he ido con retraso porque a mis padres todo el rollo de la electronica nunca les ha llamado la atencion -todo lo contrario que a mi- , en mi casa no hay equipo de musica, jamas he tenido una videoconsola, la television tiene más de 20 años y mi primer ordenador lo tuve hace 5.

En fin, que me conecto a internet por primera vez, es decir, me conecto al mundo, en el sentido más global de la palabra, salgo de mi pueblo para caer en la venerada gran telaraña de la información. Entro en mil sitios, resuelvo mil inquietudes, formulo mil preguntas a las que encuentro mil respuestas, conozco mil personas. Una epoca movidita, donde la tonica general era acostarme a las 3 o 4 de la mañana, chateando, visitando sitos porno y sitios a secas, descargando mil cosas, en fin, probando todo lo que puede ofrecer internet a un chaval como cualquier otro. Y luego, vuelta, levantarse a las 7 para pillar el autobus, estar en la facultad a las 9:30… Aprendí a dormir de pie. No de pie… de pie (eso solo lo hacen los caballos, que yo sepa), pero si sentado, en las bancas del aula, con la cabeza erguida, sin apollarla, sin inclinarla hacia ningun lado, de hecho, no puedo por ello decir tecnicamente que echaba cabezaditas en clase, porque la curiosidad era justo que no lo hacia, pero si sé que me dormia porque recuerdo tener sueños en aquel estado.

Y por fin, llega febrero y los examenes. “esta no es la carrera que quiero, y no voy a seguir subiendo a clase”. En septiembre, me iria a Málaga, ese era el plan en mi mente, desde el principio. Pero ahora estamos en febrero. Bien, vamos a ver que hacer, ayudar en el campo, sacarme el carné de conducir, estudiar para mejorar la nota en selectividad. Nada de eso. Si, chavales, lo confieso, 9 largos meses donde solo estuvimos yo y el ordenador, rascandome los cojones en el mas rastrero y literal sentido de la palabra. Desde luego, tuve tiempo para pensar, eso no lo duda nadie. Y cada vez, acostandome más tarde: las 6, las 7, las 8 de la mañana…

Y aqui, llegamos a otro punto de inflexión, punto de embullición, punto critico, cambio de estado, sublimación o como pollas querrais llamarlo. Empiezo a hacer experimentos. Hubo una primera tentativa por corregir el horario. Pensé “Si aguanto hasta las 9 de la noche sin dormir, mañana me levantaré a una buena hora”. No funcionó aquella vez, y aún despues de 3 años, no he conseguido hacer que esta técnica me funcione. De hecho, en este preciso aspecto, y a fin de compartir con vosotros una de las multiples conclusiones que he sacado (y las que me queden…), es que tras aguantar largo tiempo despierto (sin actividad física excesiva, no puedo predecir el comportamiento del cuerpo en otras condiciones) no se puede dormir muchas horas. En mi experiencia, estar 24 horas despierto y dormir a continuacion 12 no es posible. Contra todo pronostico, cada vez que lo hago, suelo dormir de 5 a 7 horas, y me levanto totalmente descansado, absolutamente incapaz de continuar en la cama, más raro aun ya que con esta cantidad de horas de sueño y en condiciones normales jamas me encuentro descansado. El resultado es que si intentaba acostarme a las 9 de la noche, a las 3 de la mañana estaba otra vez despierto… que desastre. Despertarse a esas horas es realmente deprimente.

En fin, ya en agosto, y a un mes de irme a estudiar a Malaga, mis padres se fueron de viaje dos semanas, suficiente para no tener que hacer comida, cena ni ningun tipo de compromiso. Se me fue la olla. Creo que esa semana duró 5 dias, es decir, dormi solo 5 veces. Pero no fue mas que una antesala de lo que estaba por venir, lo que tan solo me podia imaginar…

>> Llegamos a Málaga, a la vida universitaria, la residencia, la rutina ejemplar. Ya he hablado sobre esto. Llegué el domingo. El martes ya estuvimos 5 chavales hablando hasta las 5 de la mañana, 3 de los aquellos son hoy por hoy mis mejores amigos, compañeros de andanzas… Pues esa parte empezó bien. Las 6 primeras semanas subia con los mios a clase, a todas las clases, a piñon fijo. Luego pasaron una serie de cosas, un parcial, un viaje… el caso es que por primera vez, rebasé alli el limite del amanecer, consiguiendo eliminar al tiempo la posibilidad de ir a clase en el que ya era ese mismo dia. 18 de noviembre de 2002, siempre he tenido muy buena memoria para las fechas, aunque en este caso y por razones que me reservo, especialmente no se me va a olvidar. Y tambien el dia que se abrieron las fauces del infierno… para mi expediente academico. A partir de ahi, fue el acabose, el desmadre. Y lo peor es que no pasaba nada espectacular. Simplemente, la tierra seguia dando vueltas y nosotros viviamos en nuestra inopia particular.

Y ahí estabamos… cuando toda la residencia duerme para amanecer al dia siguiente, alli estabamos nosotros, dando vueltas por los pasillos, retandonos sin palabras para ver quien duraba más despierto, viciandonos a la play, viendo tanta teletienda como es mucho menos raro de lo que en verdad se cree, preparando nuestros sandwiches de atun pa mantenernos en pie, aguantando los soporiferos monologos del portero rajando sobre el dueño…. Y al final siempre era yo el que más tarde se acostaba. Al principio eramos muchos, habia mucha bulla, cuando no eran unos eran otros, por alli, si no estaba uno estaba otro. Pero a partir de cierta hora, eramos 4 que siempre estabamos a piñon fijo: Zulo, Iñaki, David y yo.

Y entonces empezariamos a hacer historia, batir records. Aguantar 20, 24, 32 horas despierto (hoy por hoy mi marca esta en 35, dipuesto a superarla en cuanto se dé la ocasión). Dormir 4 horas en 5 dias, o dormir 18 horas seguidas. Dormir 5 veces en el mismo dia. Hacer semanas de 5 dias. Peliculas una detras de otra. Jugar como cosacos al Mafia, al Colin McRae 2, al GTA, al Need For Speed Underground… Partidas de Risk (acabadas y sin acabar) de 14 horas. Y por supuesto, las prolongadisimas tertulias, que es con lo que me quedo y mejor recordaré, de todo este periodo. Pero es que no era una vez, sino una y otra y otra y otra, tantas veces como pudiera pasar.

Y así, dos años. La rutina era muy peculiar. Cada dia nos levantabamos a una hora distinta. Incluso algunas veces entre nosotros nos descoordinabamos de horarios y tal vez estabamos dias o semanas sin vernos, como muchas veces me paso con Zulo, a pesar de vivir practicamente puerta con puerta. Por lo general, habia epocas en las que conviamos de forma armoniosa con el resto de la gente y epocas en las que no veiamos a ni cristo (ni nos veian a nosotros) Un semana teniamos un horario normal, y otra estabamos son ver luz del sol. La igualdad estructural entre un dia y otro (levantarse, ducharse, primera comida, comodín de la llamada, segunda comida, comodín del publico, tercera comida, comodin del 50 por ciento, y acostarse) se veia contrarrestada por el hecho de cada dia todo sucedia a una hora distinta. Unas veces nuestro desayuno era la comida de los demas y otras la cena. De hecho, el unico factor rutina en nuestra vida eran las horas de ingesta de alimentos, horas impuestas y limitadas por la dirección y comunes para todos los residentes. A medianoche dependiamos por lo tanto de nuestra propia comida, basada en gran medida en el pan de molde y el atun. Obviaré decir que se nos olvidó que era la facultad, se nos olvidó que habia personas responsables, gente recien duchada y de parpados hinchados con los que nos cruzabamos a la hora de bajar a desayunar, la que a menudo era nuestra cena, mientras nuestros ojos eran de un rojo humo rodeados de un oscuro halo misterioso.

Y se empezo a correr el rumor, unos seres vigilaban en la noche, que instigaban al portero para que les dejase abierta la sala de internet, seres de piel descolorida; a veces, si se prestaba atencion, y se poseia suficiente valor para aguantar despierto, se escuchaba su música saliendo de sus paredes, sus carcajadas, sus pies arrastrando. Aparecian diciendo buenos dias cuando la peña veia “los serrano”, y si madrugabas dicen que podias verlos bajar a por bollos crujientes de pan. Seres que perdieron el contacto con la civilización, la capacidad para distinguir el sabor de la carne, la melodia de los arboles, la caricia de la brisa. Sus ojos crecieron, sus pupilas se rasgaron, su capacidad de orientacion en la oscuridad superaba la de los felinos y murcielagos, aquellos que vivian en sus cuevas, rodados de humo, de ropa sucia, de luz de neon… les crecieron colmillos, su sangre se volvio oscura y espesa, su piel palida, se empezaron a hipersensibilizar a las luces fuertes, solo podían vivir en la noche. (Y el poder del anillo les corrompió). Eran los vampiros. Y yo era uno de ellos.

No se lo recomiendo a nadie. Lo quiero dejar.

…me estoy quitando…

Rufo -2004-