Aunque no soy yo quién para dar mucho ejemplo (he tardado diez años en finiquitar mi carrera), aun tengo amigos que no la han acabado, y lo que les queda. Uno de ellos, aunque es treméndamente inteligente y capaz, supongo que sencillamente no le da la gana. Y le hemos tirado de las orejas, pero no hay manera. El caso es que durante años estuvo apuntado a una academia. Igualmente supongo que lo hacía como un mecanismo psicológico para autoconvencerse de la necesidad de estudiar y asistir a clase; pues de algún modo, mientras no asistir a las clases en la universidad le salía ‘gratis’, no pasaba igual con una academia: era su modo de obligarse a ir. El hecho de que, además, tampoco fuera a la academia solo añade puntos a lo rocambolesco de la historia, pero solo viene a demostrar un punto: si no pones de tu parte, no hay mucho que hacer.
Esta es la anécdota del día. Por supuesto, (pienso que) la formación debe de ser una constante en la vida, que ni empieza en la escuela ni acaba con la universidad.
En fin, a lo que voy. Dentro de esas opciones, se encuentra Netmind. Netmind ofrece cursos de formación, y facilitando la incorporación de las nuevas tecnologías en todos los procesos de negocio para maximizar su impacto en los resultados de organizaciones. Además, ofrecen cursos online presenciales mediante su plataforma OpenClass, e incluso conferencias gratuitas impartidas por el propio personal de Netmind.
Una buena opción para el proceso de mejora constante en el que debe consistir nuestra carrera profesional.