Gracias por enseñarme

NOTA: este post va absolutamente en serio.

No lo dije en su momento, tal vez por que me daba vergüenza reconocer públicamente que hasta entonces no sabía hacerlo, pero hoy me apetece decirlo:

GRACIAS POR ENSEÑARME A MONTAR EN BICICLETA.
Te quiero

Y al resto: si, que pasa, 24 años y nunca había aprendido a montar en bicicleta. Las cuestas de mi pueblo nunca han ayudado. Ahora ya solo me falta aprender a silbar de verdad y a tirarme de cabeza a una piscina. xD
Otro día contaré las cosas raras que si sé hacer y ninguno de vosotros sabéis.

Os retaría a contar vuestras capacidades y carencias, pero os lo dejo a vosotros, hoy solo quería dar las gracias.

Un R2 hecho de caperuza de desodorante (de la serie “veranieguismos”)


Un R2-D2 para Etringita

Ingredientes:

Este recortable de R2-D2
-Cartulina o papel de 100 gramos
-Una lata de refresco o cerveza…
-Cartón Pluma (para reforzar el interior, recomendable aunque no imprescindible)
-Un bote de pintura plateada para maquetas
-Esparadrapo (no de tela) o cinta de carrocero (aunque es más basta)
-Una sierra
-Pegamento de barra y pegamento de cianoacrilato (tipo superglue, para partes críticas). Y cola de carpintero.
-Tijeras y cuchilla (cutter); y opcionalmente un punzón y unos pequeños alicates de manualidades, que no vienen mal.
-Opcional: Cinta aislante azul

Y lo más importante
Un capuchón de Nivea Desodorante Roll-on para Hombre


Proceso Sigue leyendo

¿Parecidos razonables? ¡Tocaté los huevos a ver si te los encuentras! xDD

Jajajajaa, ¡os juro que es lo que me ha aparecido, no lo he retocado para nada! ¡me estoy descojonando! No me puedo creer que se pueda errar el tiro de tal forma. Tenia entendido que este test era ‘asombroso’ por su precisión , pero no puedo más que pensar que si esto es lo mejor que hay en reconocimiento facial, queda muuuuuuucho trabajo por hacer…

parecidos.jpg

Si quereis un análisis serio: no voy a hacer una autocrítica, la verdad es que no me tengo por feo. Muy mejorable, pero tampoco para tirar de comer a los orcos. Pero de lo que piense de mi mismo a lo que dice la web hay un treeeeeeeeeeeeecho muy laaaaaaaaaargoooo…. La cosa estaba limitada porque debía subir una foto de frente y sin las gafas, y tengo pocas, entre ellas esta con nariz quemada incluida. Os aseguro que en realidad más bien me parezco a esto…

Un viejo articulo del ‘Muy Interesante’

Aquí lanzo este post tipo ‘referencia’ que intento que me sirva como tal para futuros enlaces. Trata sobre un articulo que leí hace mucho tiempo en el “Muy Interesante” (hace más de diez años) y que tras un tiempo prudencial de fútil búsqueda para ofrecéroslo integro, paso a intentar explicároslo a partir de lo que recuerdo de él. Si alguno por casualidad conoce el original o tiene más datos, le agradecería mucho que me enviase alguna referencia, pues me encantaría poder dar información fidedigna acerca de los autores y la fecha del experimento.

El texto ofrecía a mi parecer uno de los análisis acerca de las relaciones sociales más esclarecedores que he leído. Hablaba de una simulación hecha con ‘entes virtuales inteligentes’, a los que a cada uno se le asignaba un comportamiento, y se estudiaba la interacción entre ellos.

En el experimento se creaban cuatro ‘razas’ de individuos, cada una de las cuales tenía un comportamiento característico. Pretendidamente simulaban un comportamiento parecido al humano, con sentido del control territorial, una tasa de nacimientos y supervivencia prefijada y un sentido de la percepción no necesariamente perfecto.
La primera raza se caracterizaba por ser absolutamente pacifista. Jamas, bajo ninguna circunstancia o tipo de agresión respondía o tomaba acciones de represalia. A estos los llamaban ‘pacifistas’
La segunda era opuesta a la primera, y se caracterizaba por una agresividad desmedida, hacia propios y extraños y sin necesidad de provocación previa. A estos se les llama ‘agresivos’
Una tercera pretendía ser justa: no agredía a nadie si no se veían agredidos, pero no dudaban en responder y tomar medidas si consideraban que se había visto atacados, haciendo uso a rajatabla de la ley del Talión: ojo por ojo, diente por diente. Los llamados ‘justicieros’
La cuarta ‘raza’, por fin, pretendía ser igualmente justa, pero con cierta ‘generosidad’, con cierta tendencia al perdón y a no dejarse guiar por ‘calentones’. Por supuesto no se quedaban parados ante una agresión, pero no eran tan radicales ni se veían tan excitados ante ellas. Les llamaban los ‘generosos’

La simulación consistía en entremezclar las cuatro razas y dejarlas interactuar, ver cual era destruida y cual sobrevivía.

Pues bien, los resultados del experimento al final eran los siguientes: la primera raza en caer, oponiendo nula resistencia, era la de los pacifistas. Su ‘terreno’ virtual era fácilmente invadido por los ‘agresivos’, que rápidamente se hacían con el control de la situación.
Sin embargo, la agresividad sin criterio de esta raza les hacia ser los segundos en caer: los conflictos internos espontáneos los abocaban a una destrucción acelerada por las guerras abiertas contra las otras dos razas, que no vacilaban en defenderse ante los ataques indiscriminados que estos emprendían. En poco tiempo eran también borrados del mapa.
Esto dejaba con dos razas, la de los justicieros y la de los generosos. Como he dicho, a cada raza se le proveía de cierto sentido territorial, cierto sentido de justicia, así como cierta tendencia al ‘error’ en sus percepciones. El caso es que de forma tan previsible como inevitable, a veces sucedían conflictos de forma espontanea. La raza de los ‘generosos’ tenía mayor tendencia a entender con mas calma los actos hostiles tanto internos como externos, asi como las violaciones a su territorio, mientras que la de los ‘justicieros’ acababan entrando en una espiral de violencia donde jamas se dejaba pasar una, que cada vez se veía acrecentada con una respuesta de mayor vigor.

Mientras la raza de ‘generosos’ sobrevivía y convivía con sus propias neuras, malentendidos y errores con un mecanismo natural que los compensaba (la capacidad de perdonar), la raza de ‘justicieros’ tenían tendencia a enfrascarse en escaramuzas que no tardaban en desembocar en guerras abiertas que a largo plazo, acababan diezmando su población.

El experimento se repetiría variando los datos en numerosas ocasiones. La mayoría de las veces el experimento daba como resultado la supervivencia de los ‘generosos’.

Las conclusiones os las dejo a vosotros.

Insisto, me gustaría tener datos precisos acerca de aquel experimento, pues dicho así, todo esto podría estar inventandomelo. De todas formas se que su valor seguiría siendo nulo si pretendiera convencer a alguien sobre cierto punto de vista aunque tuviera datos más precisos. En las simulaciones de ordenadores es muy facil cambiar las variables y conseguir un resultado u otro, y elegir el que más nos ‘convenga”. Y por no entrar a hablar del valor de la simulación de un ordenador y pretender extrapolar sus conclusiones al complejisimo mundo real.

En cualquiera de los casos, me vale a la perfección para ilustrar una idea y forma de entender la vida con la que esencialmente estoy de acuerdo.

 

¡Cálmate, colega!